La verdad os hará libres. A propósito de las Fake news (13/05/2018)

Escudo Episcopal de Obispo de Terrassa Celebramos hoy la 52 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. Este año se desarrolla bajo el lema “La verdad os hará libres. Noticias falsas y periodismo de paz”. En la actualidad, tanto las empresas de referencia de las redes sociales como el ámbito de las instituciones y de la política han comenzado a afrontar este fenómeno. También la Iglesia quiere ofrecer su aportación reflexionando sobre las causas y las consecuencias de la desinformación en los medios de comunicación y favoreciendo un periodismo que ayude a construir la paz y el entendimiento entre las personas. El Papa Francisco apela en su Mensaje a un periodismo que sirva de antídoto contra las noticias falsas y contra el mal uso de la facultad de comunicar, y propone que el mejor remedio son precisamente los periodistas educados en la verdad. Señala que la comunicación humana es una forma esencial para vivir la comunión según el proyecto de Dios, pero si el ser humano se deja atrapar por el egoísmo y el orgullo, puede también hacer un mal uso de la facultad de comunicar. La lógica de Dios, su voluntad, es que la comunicación sirva para la búsqueda de la verdad y la construcción del bien. En la actualidad asistimos al fenómeno de las noticias falsas, las llamadas ‘fake news’, en un contexto de comunicación cada vez más veloz e inmersos en un sistema digital. La aportación del Santo Padre en su mensaje se concreta en varios puntos de reflexión para ayudar a prevenir la difusión de las noticias falsas y para redescubrir el valor de la profesión periodística y la responsabilidad personal de cada uno en la comunicación de la verdad. En primer lugar, la desinformación de las  ‘noticias falsas’ tiene como consecuencia  el perjuicio a las personas concretas y el deterioro del bien común. Con la desinformación se desacredita al otro, se le presenta como enemigo, se favorecen los conflictos. Todos somos responsables ante este problema, y nadie puede eximirse de la obligación de hacer frente a estas falsedades. La educación es la mejor forma de detectar las noticias falsas: Educar en la verdad para saber discernir, valorar y ponderar los deseos y las inclinaciones que se mueven en nuestro interior, para no caer repetidamente en la tentación. El método más seguro para superar el veneno de la falsedad es precisamente dejarse purificar por la verdad. Y ¿cómo descubrirlo y aplicarlo? Responde el Papa que para discernir la verdad es preciso distinguir lo que favorece la comunión y promueve el bien, y lo que, por el contrario, tiende a dividir y enfrentar. La verdad no se presenta como una imposición extrínseca e impersonal, sino que brota de relaciones libres entre las personas, en el diálogo y la escucha mutua. Podemos distinguir si los titulares de las noticias crean polémica, fomentan la división, o si llevan a la reflexión serena, al diálogo constructivo, al trabajo eficaz. La verdadera noticia es la paz, y el mejor antídoto contra las falsedades son las personas que están dispuestas a escuchar, y permiten que la verdad emerja a través de un diálogo sincero.  El periodista, no realiza sólo un trabajo, sino que tiene una verdadera e importante misión. Por eso ha de ser consciente de que lo más importante no es la rapidez en dar la noticia o el impacto sobre las cifras de audiencia, sino que lo principal son las personas. Por eso es tan importante la verificación de las fuentes y la veracidad de la comunicación, que generan confianza y favorecen la comunión y la paz.  

+ Josep Àngel Saiz Meneses
Obispo de Terrassa

+ Josep Àngel Saiz Meneses

Obispo de Terrassa